sábado, 18 de mayo de 2013

PORNOGRAFIA PARA EL MUNDO

El cuerpo y los actos sexuales humanos, han sido desde todos los tiempos y en diversos contextos venerados, magnificados, honrados, glorificados, admirados, pero también detestados y reprobados. La pornografía es una de las manifestaciones más significativas y antiguas que encontramos de estas consideraciones.

Este fenómeno ha evolucionado en las últimas décadas utilizando como herramienta principal la tecnología. La pornografía, tal como la conocemos hoy en día, surgió con la aparición de la fotografía, en lo sucesivo la invención del cinematógrafo amplió aún más su producción, sobre todo después de la Segunda Guerra Mundial. En la década de 1980 llegó al público a través de videos y con la difusión masiva de éste, millones de personas en todo el mundo pudieron ver películas porno en la privacidad de sus hogares. En la última década con el surgimiento de Internet, el porno ha alcanzado una expansión mucho mayor.

El cristianismo se ha opuesto desde tiempos remotos a las manifestaciones sexuales de este tipo, convirtiéndolas posteriormente en un tabú. Sin embargo, dejando atrás esta doctrina, famosa por satanizarlo todo, nos enfocamos en argumentos más sólidos para desarrollar dos posturas (negativa y positiva) sociales que se refieren a este hecho.

El desarrollo del argumento que rechaza la pornografía se solidifica con diversos estudios presentados por reconocidos científicos.

El psicólogo Edward Donnerstein (universidad de Wisconsin) encontró que una breve exposición a formas violentas de pornografía pueden llevar a actitudes y comportamientos antisociales. En un estudio, los investigadores Dolf Zillman y Jennings Bryant investigaron los efectos de la pornografía no violenta en la crueldad sexual y en la trivialización de la violación. Demostraron que la exposición continua a la pornografía tenía efectos adversos sobre las creencias acerca de la sexualidad en general y sobre las actitudes hacia las mujeres en particular. Dolf Zillman midió el impacto de ver pornografía en los puntos de vista de los sujetos acerca de lo que constituye una práctica sexual normal. El grupo que vio la mayor cantidad de pornografía dio estimaciones mucho más altas de la incidencia del sexo oral, el sexo anal, el sexo grupal, el sadomasoquismo y la bestialidad que los otros dos grupos. Un estudio demostró que la pornografía puede disminuir la felicidad sexual de una persona.

Por otro lado tenemos que la pornografía fomenta una buena educación sexual (previniendo embarazos, enfermedades de transmisión, evidenciando diversas maneras para obtener una mayor satisfacción sexual etc.), además que se ha convertido en un excelente estimulador tanto masculino como femenino.

Desarrolladas estas dos posiciones tenemos que La pornografía es y ha sido siempre una forma de estimulación erótica y de aprendizaje, pero el problema puede surgir cuando éste se aleja mucho de la realidad y los jóvenes se educan sexualmente basándose en expectativas irracionales y en modelos distorsionados que a la vez provocan desequilibrios sociales.

BIBLIOGRAFIA

Zavála, Leila 2013 “Pornografia ,Cuerpo y deseo” Conferencia UAM-Encuentro Nacional de estudiantes de sociología, Instituto de Investigaciones Sociológicas UABJO, Mayo 2013.

Nombre : Viaani Coral Mendoza López

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