Postura ante el pasado partido del “américa”, la presidencia de Peña Nieto y el alza del precio de la gasolina.

Ante el pasado partido jugado entre los equipos nacionales, por la final del campeonato, surgió ante mí una serie de preguntas, pues ya pasaron algunos días y aún hay personas cobrando apuestas, portando su playera, celebrando, o recuperándose de la fiesta, que a cualquier persona le llega cuando su equipo gana una final.
Lo que me creo el escandalo fue que durante el trayecto a la escuela, el chofer del transporte entro en la gasolinera, y comenzó a quejarse del precio del combustible; ya que cada determinado tiempo este aumenta su precio, y seguirá elevándolo hasta que se pueda retirar el subsidio que el gobierno da, tal vez hasta que llegue a $15 o $17 pesos; y le comente sobre el subsidio que el gobierno quería quitar de los combustibles a lo que me respondió con serie de preguntas, con lo que me di cuenta que no estaba enterado, pero después de eso comenzó a hablar del partido de futbol, del cual si estaba enterado y según algunos comentarios que realizo había suspendido sus labores para dedicar el tiempo a ver el partido, ya que “le iba al américa”.
Es imposible, que estemos pasando por momentos difíciles en cuanto a la economía, porque el aumento a los combustibles supone un aumento a los precios de todos los productos, y no a los salarios, y que no nos preocupemos por ello. Para colmo nos organizamos para hacer cosas sin sentido, perder el tiempo, consumir placebos, pero no para hacer algo que verdaderamente nos saque de donde estamos.
Metí a peña en este discurso, porque es la persona que nos representa ante el mundo, y quien debería administrar los bienes de la nación y encargarse de cosas como las que hable hace algunos momentos, y debería asumir una posición formal y seria ante los hechos, por desgracia es la burla de la nación y ¿cómo no serlo? Si es un puesto que ocupa otra persona que lo coloco en ese lugar para gobernar desde atrás de él, aunque nadie sabe si realmente es alguien que está velando por intereses propios y que solo espera que tengamos la atención en otro lado para enriquecerse de manera ex orbital.
Para concluir con mi discurso de odio, solo quiero agregar que merecemos algo así, ya que por cómo nos comportamos no merecemos algo mejor. Esto por la evidencia obtenida solo de los días anteriores ya que muchos prefieren saberse el partido completo, embriagarse después de él, dejar a un lado el trabajo antes que informase de lo que pasa.