Erasé
una vez en el bosque de rabbitland, existían muchos conejos, habían sido la
única especie animal que sobrevivío después de que el hombre acabará con los
ecosistemas.
Lola
la coneja, tenía muchos amiguitos siempre jugaban en el bosque, era la más
grande de todos, una tarde los demás animales del bosque, le pidieron que
contara acerca de su familia y escuela, encantada decidio hacerlo, todo comezó
así..
Soy
la quinta coneja de 50 hermanos, provengo de familia numerosa (esto se debe a
los genes de nuestros antepasados las liebres), lamentablemente mis hermanos
enfermaron de una epidemia y solo nos salvamos 5, mamá y papá dicen que por
algo suceden las cosas, afortunadamente
somos una familia muy unida, entre todos colaboramos para mantener el ambiente
familiar de manera armoniosa.
Mi papá es un ejecutivo de la bolsa
rabbitsiana de zanahorias, que maneja las acciones de la zanahoria de todo el
poblado, mamá sólo se dedica a nuestro cuidado y al del hogar, cabe mencionar,
que prepara diversos platillos de zanahoria, muy ricos, mis hermanos y yo
contribuimos con mama al traer nectar del flores que le dan un toque especial a
sus platillos, bueno eso solo lo hacemos cuando no nos dejan mucha tarea.
Todas las mañanas tenemos que ir al colegio
“corazon zanahoria” ya que tomamos el tema del colegio –dijo lola- les platico
un poco sobre este, en el colegio nos enseñan a reconocer los mejores nectares
de flores, a saber cuidar las nuevas especies de estas, ya que debido al mal
trato que a las flores y naturaleza en general que humanos les dan.
Los
animales tratamos de cuidar nuestra nueva y regenerada naturaleza, ese es el fin de ir al colegio, el no cometer los
mismos errores que los humanos hicieron y que llevaron a la destrucción a
nuestro planeta –todos estaban muy al pendiente-.
Según
nos cuenta nuestra profesora de historia, que por los años 2012 y 2013… el
planeta estaba enfermo tenía demasiada contaminación, habian guerras, temblores,
terremotos, y un sin fin de sucesos terribles que poco a poco llevaron a su fin
a la naturaleza. mi maestra no pertenece
a nuestra especie –aclaró lola- cabe mencionar, ella es una topo, ya es grande
de edad y fue una de las pocas sobrevivientes de topos, es por ello que en
nosotros puede ver la oportunidad que en su niñez no vio, de cuidar la nueva
era del planeta,con nuevas especies, tanto animales, humanas, etc.
Evelyn
Yarabit Santiago P.
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