lunes, 10 de junio de 2013

Camino hacia mi propio yo.

Hoy quiero salir de esta rutina, quiero conocer la libertad de volar con mi mente fuera de esta realidad. Quiero tan solo estar conmigo mismo por aunque sea una sola vez, en donde quizás una buena excusa seria despojar por un buen rato todo lo que me hace mal.
Siento entrar en una conexión que no pudiese describir, es algo que necesitas sentir por ti mismo, para así poder entenderme. Al fin me doy cuenta que me encuentro solo, en un agujero de inmensas ideas, en donde lo existente es todo lo que puedas imaginar.
Me siento en un estado en donde el más mínimo e insignificante problema tiene una gran importancia para alterar mi visión. Tengo miles de pensamientos que brotan de mí ser hacia lo desconocido. Y es en donde me doy cuenta que me encuentro al fin con mi propia verdad.
Llego a tener una satisfacción muy grande al conocer este estado de meditación, en donde me doy cuenta que las cosas solo pasan una sola vez y es necesario siempre disfrutar el momento. Me doy cuenta que todo acto tiene una consecuencia que me hace reflexionar sobre mi propio yo. Es en ese preciso momento que me encuentro confundido por querer saber lo que sucede con mi conciencia, es algo difícil de explicar. De pronto todo se pierde entre mí y el mundo real, comienzo a sentir una vibra que pasa lentamente por todo mi cuerpo haciéndome sentir algo tan satisfactorio que desearía que nunca se acabara.
Mi mente se pierde entre mis pensamientos, siento dentro de mí una energía que trato de oprimir, pero esta es tan grande que es capaz de vencerme en ese momento. Me siento asustado, esa sensación de aquella energía me provoca una confusión. Pero de pronto el pensar en aquella energía hace que todo tenga una cosmovisión diferente. Al fin me doy cuenta que lo sucedido era parte de mí, algo que yo mismo abría alterado.
Me siento diferente, mi conciencia se abre cada segundo, me siento en un estado de conciencia muy extraño. Aprecio en todo mi ser algo maravilloso, ahora digo solamente y más que lo que verdaderamente siento. Nunca espere esto, es algo verdaderamente formidable.
Al fin me siento liberado, siguiendo un solo camino, este camino es el camino de la libertad. Un difícil camino en donde se puede caer, pero siempre levantarse.
Ahora solo busco el lugar en donde me pueda liberar, para así poder alzar el vuelo y nunca caer.

RODRÍGUEZ CRUZ SAAID

No hay comentarios:

Publicar un comentario