“Los pobres no son peligrosos”

En días anteriores nos fue llevada una conferencia; en el instituto es bastante raro que llegue alguna conferencia de mala calidad y generalmente asisto por gusto, aunque la asistencia a muchas de ellas es de carácter obligatorio; que hablaba de la pobreza en América latina, la cual fue impartida por un francés.
La verdad el expositor me cayó mal, por su forma de portarse con el público y con sus asistentes, a los que insultaba constantemente con indirectas, pero sobre todo por lo que dijo de los pobres.
Comenzó lanzando una serie de cifras en las cual revelaba la poca confianza que las personas tienen en la policía (cosa que en México no necesitas cifrar ya que es demasiado evidente), la producción perca pita, niveles de inseguridad (por número de muertos), ingresos del gobierno por impuestos directos e indirectos y luego todo se puso feo, porque creo dos categorías de pobreza, una relativa y otra absoluta, donde dijo que los países donde el gobierno tiene más ingresos por impuestos de manera directa es donde existe pobreza relativa, ya que los pobres no son verdaderos pobres más bien, no tienen los mismos recursos que los ricos, y los países que sus gobierno obtiene más recursos de manera indirecta existe la pobreza absoluta, y esta es en la que viven los latinoamericanos, que no su canasta básica es más cara que su salario.
La gota derramada por el vaso está en el momento en el que dijo que en los países con pobreza absoluta los niveles de criminalidad son mucho más altos, para concluir diciendo que “los pobres no son peligrosos, más bien son víctimas de políticas de gobierno mal aplicadas”, cosa que de verdad me molesto mucho porque me considero pobre, y porque convivo todos los días con gente pobre, al igual que yo, y nunca he llegado a pensar en el riesgo en el que estoy por convivir con ellos, para que alguien venga a decirme que no son peligrosos, y que además, los ricos si nos consideran peligrosos.
Pro bueno, para “rescatar” algo de la conferencia y de las cifras que nos dio, una conclusión a la que se puede llegar y quiero agregar a mi apunte, que existe un círculo vicioso entre la desconfianza hacia las autoridades, los bajos ingresos del gobierno de manera directa y la pobreza. Primero, un pobre no puede pagar impuestos, luego el gobierno no puede pagar seguridad (o ese es el argumento que él ocupa), y se la cobra a las empresas, que las pasan directamente a los consumidores (otra vez los pobres) y se disminuye la seguridad al no existir un ingreso directo, que termina obligando a los pobres a delinquir, para pagar los impuestos que están llegando de manera indirecta a ellos, y que no pagan de manera directa por dos motivos, el primero que ya mencione y el segundo, porque no va a pagarle a alguien en quien desconfía. Y que además es una desconfianza fundada en las pocas respuestas que se obtienen por parte de las autoridades.